El verano es la época más especial para muchas personas por la llegada de las ansiadas y merecidas vacaciones. Tras largos meses trabajando, con estrés e incluso ansiedad, llega el momento de olvidarse de todo y evadirse a través de la tranquilidad y el ocio. En Aventuring, proponemos una serie de actividades con las que las personas podrán disfrutar de todo ello. En este artículo, queremos hacer hincapié en los tips que debemos seguir para evitar un golpe de calor, ahora que las temperaturas en algunas ciudades son extremas.

El golpe de calor se produce porque nuestro cuerpo se dispara hasta los 40 ºC

El deporte es fundamental para gozar de una buen salud. Todos los médicos recomiendan practicarlo regularmente al menos 30 minutos o 1 hora. A pesar de ello, la combinación de altas temperaturas, humedad y el cansancio de los ejercicios, puede ser una combinación explosiva y perjudicial.

El golpe de calor en el deporte se considera como la segunda cosa de muerte en los deportistas, tras las lesiones de índole medular o cerebral. Es muy importante entender cuáles son las causas fisiológicas para entender el riesgo y sobre todo, prevenirlo.

El golpe de calor se produce cuando existe un fracaso multiorgánico, que afecta a los órganos internos. Este hecho es derivado de una subida de la temperatura corporal por encima de los 40 ºC y un fallo en los mecanismos termorreguladores por una sobrecarga térmica de origen exógeno, en el exterior, o endógeno, en el interior.

Al producirse un exceso de temperatura en nuestro cuerpo, nuestra frecuencia respiratoria aumentará mientras los vasos sanguíneos de la piel se dilatan, de modo que se pueda perder más calor con la respiración, el aumento de circulación en la piel y la subida de sudoración. De esta manera, la sangre oxigenada que alcanza los tejidos y órganos internos, se reduce.

Existen ciertos factores de riesgo para que se produzca un golpe de calor: mala condición física, exceso de grasa corporal, deshidratación, afecciones médicas, historial de otros golpes de calor, falta de sueño, ingesta de medicamentos y falta de conocimientos sobre el golpe de calor.

¿Cómo podemos prevenir un golpe de calor?

Las recomendaciones van ligadas a aplicar nuestro sentido común a la hora de hacer deporte, así como a las condiciones climáticas que existan. Deberemos permanecer en zonas frescas y aisladas, no realizar ejercicios en las horas centrales de más calor y usar tejidos que protejan del sol y a su vez, favorezcan la transpiración.

Además, permaneceremos alerta a la hidratación y a nuestra alimentación, daremos tiempo al organismo para recuperarse entre cada actividad deportiva, no nos expondremos al sol hasta después de las 17:00 horas, trataremos de dormir adecuadamente y consumiremos frutas y verduras.

Todo ello acompañado del hecho de evitar aglomeraciones, refrescarse tirándose agua si hace mucho calor frecuentemente, beber isotópicos aunque no tengamos sed, evitar el alcohol, el tabaco, no tomar infusiones calientes o que estén azucaradas, usar ropa ligera y holgada de colores claros y muy importante, utilizar gorra para proteger nuestra cabeza tanto del sol como del calor.